Trastornos del oído medio
En un artículo anterior, conocimos las principales afecciones que se pueden generar en el oído externo.
Hoy conoceremos los trastornos del oído medio y las principales dolencias que le pueden afectar.
El oído medio está formado por el tímpano (membrana timpánica) y una cámara llena de aire que contiene una cadena de tres huesos que conectan el tímpano con el oído interno
La función del oído medio es actuar como un amplificador, de los sonidos que capta el oído externo, que pasa al oído interno cuya función es de transductor, que convirtiendo las ondas sonoras mecánicas en una señal eléctrica que son transmitidas al cerebro a través del nervio auditivo.
Trastorno del oído medio
Los trastornos auditivos que se producen en el oído medio, pueden presentar una sintomatología muy parecida a aquellos generados en el oído interno, incluso provocar un trastorno en el oído interno.
Causas de los trastornos del oído medio
Estos trastornos pueden ser provocados por diferentes causas que vemos a continuación.
Infecciones
Las infecciones, interfieren directamente en el buen funcionamiento del oído medio y entre las más habituales podemos encontrar:
Otitis en el oído medio
La otitis en el oído medio, puede desarrollarse de forma aguda o crónica.
Una otitis aguda suele ser consecuencia de una infección por virus o bacterias, generalmente como complicación de un resfriado común o de alergias.
La otitis media puede aparecer a cualquier edad, siendo más frecuente en niños de edades entre los 3 meses y los 3 años.
La causa de que aparezca en este rango de edad, se debe a que las estructuras del oído medio, como la trompa de Eustaquio, son inmaduras y todavía no funcionan correctamente.
Los síntomas y el tratamiento son similares en los adultos y en los niños mayores
Como norma, suele ser una afección dolorosa en el que se aprecia un enrojecimiento del tímpano, pudiendo también en algunos casos aparecer fiebre vómitos o incluso supuración del oído debido a la rotura del tímpano abombado.
Si en una otitis la infección se llegara a propagar, provocaría fuertes dolores de cabeza, confusión o incluso llegar a la alteración de la función cerebral.
Miringitis
La miringitis está considerada un tipo de otitis del oído medio aguda y está causada por diversos virus y bacterias entre las que son más frecuentes encontramos Streptococcus pneumoniae y Mycoplasma.
Consiste en la inflamación del tímpano, donde además se forman pequeñas ampollas en la superficie llenas de líquido.
Estas ampollas, también podríamos encontrarlas ocasionalmente en la otitis media, aunque la miringitis no provoca pus ni líquido en el oído medio.
Su sintomatología, es clara, pudiendo empezar un dolor repentino que suele durar entre 24 y 48 horas.
Estamos ante un tipo de patología, en la que puede producirse fiebre y cierta pérdida auditiva.
Mastoiditis
Si por causas como una otitis media a la que no se ha puesto tratamiento o tratada inadecuadamente la infección se extendiese hasta el hueso que lo rodea (Apófisis mastoide), estaríamos ante una Masteoiditis.
Definiendo la mastoiditis como una infección bacteriana de la apófisis mastoides.
En la mayoría de casos está causada por bacterias neumocócicas. Una mastoiditis tratada incorrectamente puede provocar sordera, infección de la sangre (septicemia), infección de las membranas que envuelven el cerebro (meningitis), un absceso cerebral o incluso la muerte.
Generalmente, los síntomas de una Mastoiditis, suele aparecer a los días o incluso semanas de haber desarrollado una otitis.
Puede aparecer fiebre, dolor alrededor y dentro del oído que tiende a ser persistente y pulsátil, y una secreción profusa y cremosa, apareciendo también una pérdida auditiva que puede ir en aumento.
Obstrucción de la trompa de Eustaquio
Las trompas de Eustaquio conectan los oídos medios con la parte posterior de la garganta y ayudan a que los oídos drenen líquido además de mantener la presión del aire en los oídos a niveles adecuados.
Cuando realizamos acciones como tragar o bostezar, las trompas se abren brevemente para permitir que entre aire e igualar la presión interna de los oídos con la presión exterior.
En ocasiones y generalmente derivado de un proceso gripal, alergias o una infección de los senos paranasales la presión negativa o el líquido quedan atascados en el oído medio y si la presión fuera del oído aumenta demasiado puede causar dolor de oído, dificultades de audición, sensación de oídos taponados, zumbidos o incluso mareos.
Lesiones
Perforación del tímpano
Las perforaciones del tímpano suelen estar causadas por infecciones y lesiones del oído medio.
Cuando se produce una perforación del tímpano, generalmente aparece un dolor repentino que algunas veces es acompañado con sangrado, pérdida auditiva o ruido en el oído.
Podemos encontrar dos tipos de causas para que se produzca la perforación del tímpano. Causas traumáticas y causas no traumáticas.
La infección del oído medio es la causa no traumática más común de perforación del tímpano.
Una infección del oído medio suficientemente grave como para provocar la perforación suele ser bastante dolorosa, debido a la presión por la acumulación de líquido infectado, pus.
En las causas traumáticas, hechos como una inmersión subacuática, una explosión o una bofetada en el oído, generarían un aumento de la presión suficiente que llegaría a perforar el tímpano.
El tímpano también puede llegar a perforarse por una punción con algún objeto como un bastoncillo, palillos y otros objetos que algunas personas suelen utilizar para retirar el cerumen.
Barotrauma
El barotrauma es la lesión timpánica causada por los cambios rápidos en la presión del aire.
Normalmente, la trompa de Eustaquio, ayuda a mantener la presión en ambos lados del tímpano, permitiendo el paso del aire del exterior al oído medio.
Pero cuando la presión exterior del aire cambia bruscamente, como ocurre en las inmersiones, en el ascenso o descenso de un avión, el aire debe moverse a través de la trompa de Eustaquio para igualar la presión en el oído medio, pero…
Si la trompa de Eustaquio está obstruida por algún tipo de lesión, cicatriz o patología, el aire no puede circular con normalidad, impidiendo la compensación de la presión.
La diferencia de presión resultante provoca dolor y frecuentemente pérdida auditiva, pudiendo llegar a dañar el tímpano o incluso causar su rotura y una hemorragia.
Ante diferencias de presión es muy grandes, la ventana oval podría romperse, permitiendo que el líquido del oído interno se derrame hacia el oído medio.
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