La Fatiga Auditiva

La Fatiga Auditiva

A la pérdida temporal de la audición debido a una sobreexposición a altos niveles de ruido, se le conoce como fatiga auditiva.

Realmente, no somos conscientes de los niveles de ruido a los que sometemos a nuestros oídos a diario en nuestra rutina y como esto puede llegar a afectarnos.

El oído es una parte extremadamente delicada de nuestro organismo y una lesión en el oído con pérdida auditiva puede llegar a ser irreparable.

El oído, es el órgano esencial para recibir sonidos y poder oír bien, pero también interviene en nuestro equilibrio corporal de forma activa.

Proteger nuestros oídos de ruidos excesivamente altos, es primordial para tener una buena salud auditiva.
 
 

El ruido como causa principal de la fatiga auditiva

La edad, la genética o factores externos como la humedad o el calor, interfieren en nuestra salud auditiva.

Por encima de todos estos actores, el ruido, es el principal causante de la fatiga auditiva.
 
 

Cuando aparece esta dolencia

La fatiga auditiva, es más frecuente de lo que podemos llegar a pensar, debido a nuestro estilo de vida, aficiones y trabajo.

Un mal control del ruido que se genera en nuestro entorno, conlleva esta pérdida auditiva temporal debido al dañando ocasionado en el nervio acústico y las células del oído interno.

Seguro que en algún momento has notado esta sensación  de oír como a distancia, como si hubieses perdido audición, en algunos casos como por ejemplo:

Después de pasar varias horas en la discoteca.

Al quitarte los auriculares que has utilizado con un volumen alto.

Cuando sales de una feria de atracciones muy concurrida.

Después de utilizar o estar cerca de maquinaria ruidosa, como martillos hidráulicos.

Al haber conducido un coche de carreras en un circuito.

Cuando es disparado un arma varias veces en la práctica de tiro.

Aunque estos son solo algunos ejemplos, ya podemos intuir que una exposición a ruidos elevados nos producirá fatiga auditiva.
 
 

No es una pérdida auditiva definitiva

Este tipo de pérdida auditiva, no es crónica. Como hemos comentado, esta ocasionada por la exposición a fuertes ruidos en un espacio de tiempo determinado.

Dependiendo de nuestra salud auditiva y del tipo de ruido al que hayamos estado expuestos, recuperaremos nuestra normalidad auditiva entre 2 y 16 horas después de la exposición.

Aunque no es una pérdida auditiva definitiva, sique es un indicador de que nuestros oídos, han estado sufriendo, por lo que si continuamos con esas prácticas sin tomar medidas de protección, podemos acabar padeciendo una perdida auditiva irreversible.

 
 

Como evitar la fatiga auditiva

En otros artículos, hemos hablado sobre el ruido, como este, puede afectar a nuestra salud auditiva y como está presente en nuestra vida.

Tanto si vivimos en una gran ciudad, una zona industrializada, tenemos un trabajo en el que estamos expuestos a fuertes ruidos o simplemente nuestras aficiones se desarrollan en ambientes muy ruidosos como discotecas o circuitos, proteger a nuestros oídos es fundamental para conservar su buena salud.

De lo contrario, estamos sobreexponiéndolos a un entorno perjudicial que puede acabar convirtiéndose en una pérdida auditiva definitiva.

La primera recomendación, seria evitar ese tipo de ruidos o volumen excesivo, pero claro, eso no siempre es posible.

La utilización de tapones para los oídos o cascos, hacen posible reducir la intensidad que nuestros oídos perciben, protegiéndolos de forma activa.

Estos tapones, nos protegen, pero no nos aíslan, es decir, podemos seguir escuchando los sonidos de nuestro entorno, conservando el espacio seguro, pero cuidando de nuestros oídos.

Dependiendo del tipo de ruido o intensidad al que nos vallamos a someter, deberemos elegir el tipo de tapón apropiado, ya que existen modelos con mayor capacidad de aislamiento acústico.

Otra de las recomendaciones, es la realización de un examen audiológico de forma periódica, sobre todo si la exposición es constante como consecuencia de nuestro puesto de trabajo o aficiones por ejemplo.
 
 

Los síntomas

Su sintomatología se limita a la pérdida de audición tras la exposición al ruido que puede estar acompañado de Acufenos (Pitidos en los oídos)

Como hemos comentado, estos síntomas son pasajeros y recuperaremos nuestra audición normal en cuestión de horas.

 
 

La revisión auditiva pos exposición

Uno de los principales problemas que puede ocasionar la exposición a ruidos, no solo un ruido fuerte de corta exposición como un disparo, sino algunos otros como los generados por el tráfico, es el daño que se puede ocasionar en las células del oído interno y el nervio acústico.

Par poder diagnosticar este tipo de lesiones, existen varias pruebas que se realizan en centros auditivos especializados como los nuestros.

Dependiendo del tipo de ruido al que se ha expuesto y la sintomatología, se realiza un tipo de prueba u otra con el fin de determinar si existe una pérdida auditiva irreversible, si existe daño en celular o afectación del nervio acústico.