Aviones y dolor de oído: cómo evitarlo
Independientemente de cuánto pagaste por tu asiento, cuánto espacio para las piernas tienes o si estás volando en primera clase o en clase turista, una cosa que muchos viajeros aéreos tienen en común es la molestia en los oídos. La presión del oído, los estallidos e incluso el dolor severo no discriminan.
Si bien la mayoría de las molestias en los oídos durante los viajes aéreos no son más que una molestia, ¿qué sucede cuando se agravan? Desafortunadamente, el dolor de oído y la presión, en casos excepcionales, provocan dolor intenso y pérdida de audición, por lo que es mejor tomar precauciones antes, durante y después de su vuelo.
Los viajes en avión aumentan la presión en los oídos
Todo se reduce a la fluctuación de la presión del aire. Normalmente, la presión del aire dentro del oído interno y la presión del aire fuera son esencialmente las mismas, o al menos no lo suficientemente diferentes como para causar problemas. El problema solo ocurre cuando el cambio de altitud es tan rápido, como en los viajes en avión, que la presión dentro del oído interno y la presión del aire en el exterior no tienen tiempo de igualarse. Esto se conoce médicamente como barotrauma del oído.
Cuando su vuelo despega y el avión comienza su ascenso, la presión del aire dentro del oído interno supera rápidamente a la presión del exterior. La membrana timpánica o el tímpano se hincha hacia afuera.
Por el contrario, si la presión del aire dentro del oído interno se vuelve rápidamente menor que la presión del aire afuera, la membrana timpánica será succionada hacia adentro, casi como un efecto de vacío. Lo que ha sucedido es que la trompa de Eustaquio se ha aplanado y necesita un poco de su ayuda para seguir haciendo su trabajo de llevar aire al oído interno. Ya sea ascendente o descendente, el estiramiento del tímpano puede causar dolor.
Durante este tiempo, el tímpano no puede vibrar, por lo que también experimenta una disminución de la audición y sonidos apagados.
Cómo prevenir el dolor de oído al volar
Todos los que han volado en un avión han sentido los efectos de un cambio de altitud en los oídos; una sensación de plenitud y estallido es un lugar común. Debes igualar la presión introduciendo la mayor cantidad de aire posible a través de la trompa de Eustaquio y hay varias formas de hacerlo.
1. Tragar
Cuando tragas, ese chasquido que puedes escuchar es una pequeña burbuja de aire que se ha movido desde la parte posterior de la nariz hasta el oído medio, a través de la trompa de Eustaquio. La trompa de Eustaquio asegura que el aire en el oído medio se reponga constantemente. Ese aire luego se absorbe en las membranas del oído interno y el ciclo comienza de nuevo. Este ciclo constante de aire asegura que la presión de aire en ambos lados se mantenga igual. Cuando vuela, el truco es asegurarse de que las trompas de Eustaquio trabajen horas extras y se abran con más frecuencia para adaptarse al cambio en la presión del aire.
2. Masticar chicle o chupar caramelos duros
Masticar chicle o chupar caramelos duros estimulará la deglución frecuente, lo que ayuda a equilibrar la presión del aire.
3. Maniobra de Valsalva
Con una bocanada de aire, cierra la boca y aprieta las fosas nasales. Extre el aire con suavidad hasta que los oídos se le revienten. Esto abre los tubos Eustacianos. Si tienes un resfriado o alergias, no se recomienda la maniobra de Valsalva, ya que podría causar una infección de oído grave. En su lugar, pruebe un método menos conocido llamado la maniobra de Toynbee: cierre la boca y la nariz y trague varias veces hasta que la presión se iguale. Repita cualquiera de las dos técnicas según sea necesario.
Otros consejos de expertos
- Permanece despierto durante el ascenso y descenso.
- Bebe muchos líquidos durante el vuelo para mantenerse hidratado.
- Bosteza.
- Pruebe EarPlanes, tapones para los oídos especialmente diseñados que tienen un filtro para igualar la presión.
- Use el aerosol nasal 1 hora antes del aterrizaje y solo cuando sea necesario.
- Toma un descongestionante 1 hora antes del aterrizaje y también después del vuelo hasta que los oídos se normalicen.
Aviones y dolor de oído en bebés, niños pequeños y niños
Para los bebés, cuyas trompas de Eustaquio son mucho más estrechas que las de un adulto, el
cambio en la presión del aire puede ser aún más insoportable, por lo que se recomienda un
biberón o un chupete para aumentar la deglución, especialmente al descender.
Los niños mayores pueden chupar una piruleta, beber con una pajita o hacer burbujas con una
pajita para aliviar el dolor de oído. Antes del vuelo, también puede hablar con un pediatra
sobre la posibilidad de usar gotas para los oídos para aliviar el dolor durante el vuelo.
No te arriesgues a tener un tímpano roto
Si estás muy enfermo con un resfriado, gripe, alergias o congestión, el viaje podría causar un bloqueo en la trompa de Eustaquio, impidiendo la necesaria compensación de presión. Puede ocurrir una ruptura del tímpano o una infección grave que causaría pérdida de audición o daño permanente al oído.
Ante la duda, recuerda que nuestro equipo de profesionales está aquí para ayudarte. Contacta con nosotros a través del teléfono gratuito 900 505 652 o en cualquiera de nuestros centros distribuidos a lo largo de la Comunidad Valenciana, Madrid, Reus y Mondragón.
