La pérdida de audición, una razón más para no fumar
Hoy celebramos el Día Mundial Sin Tabaco, bajo el lema “Tabaco y cardiopatías”para recordar que fumar no sólo perjudica gravemente la salud en general y a la cardiaca en particular, sino que también es perjudidial para la salud auditiva: incrementa notablemente los riesgos de perder #audición. Las probabilidades de sufrir pérdida auditiva debido al humo del tabaco se han incrementado a lo largo de estos años y afectan no sólo a los propios consumidores de cigarrillos, sino también a los no fumadores.
Los fumadores pasivos también corren el riesgo de ver afectada su capacidad auditiva. Este riesgo para nuestros oídos se explica a través de una teoría fundada por un grupo de investigadores según la cual, el humo del cigarro disminuye el flujo sanguíneo de las arterias que transportan el oxígeno al oído interno. El #oído recibe menos flujo de sangre y deja de funcionar correctamente. Con esta sencilla afirmación, se pone de manifiesto que la exposición al humo del tabaco deteriora nuestra capacidad auditiva.
Recientemente y tomando como referencia al Reino Unido, se analizó el historial de 164.770 adultos británicos, de entre 40 y 60 años, a los que se realizaron pruebas auditivas entre 2007 y 2010. Según pusieron de manifiesto los resultados de este estudio, los fumadores habituales tienen un 15,5% más riesgo de padecer pérdida de audición.
La OMS concluye que en lo referente a la salud auditiva, la prevención ayuda a que casi la mitad de los casos de pérdida auditiva puedan evitarse, para lo cual resulta fundamental someterse a revisiones periódicas del oído.
Por ello, si notas algún síntoma de pérdida auditiva, no lo dejes: es el momento de revisar tu audición en cualquiera de nuestros centros auditivos. También de abandonar el tabaco, si eres fumador@ o intentar no ser un fumador pasivo. Nuestros Audiólog@s comprobarán si tu audición se está deteriorando, planteándote la mejor solución auditiva de ser así, con audífonos de última generación que te garantizan disfrutar de una audición plena.
